Por: Edgar González
El éxito académico puede venir determinado por el conocimiento y la comprensión de cuáles son las habilidades sociales consideradas relevantes por los docentes de la Educación Secundaria. Este conocimiento y esta comprensión pueden facilitar las intervenciones para mejorar la respuesta de los alumnos a las demandas específicas de los contextos educativos.
La Facultad de Educación de la UNED nos presenta un estudio realizado a 198 docentes donde se analiza esta reflexión. En este informe se destaca que no hay ninguna habilidad social “no relevante”, así que todas son significativas. En el siguiente listado se presentan de más a menos significativas: cooperación, responsabilidad, extroversión, aserción, comunicación, autocontrol y empatía.
Las habilidades sociales
Las habilidades sociales tienen una gran importancia para una buena integración social (Zsolani, 2002). Recientes estudios como los de Garaigrdobil (2015) indican que una de las cinco variables predictoras de la felicidad es la manifestación de conductas cooperantes, lo que confirma la relación entre bienestar y sociabilidad.
Cambio de orientación
Desde esta perspectiva se busca un cambio de paradigma: en vez de esperar las conductas disruptivas en el aula a las que responder con sanciones negativas, se plantea identificar las expectativas de los docentes sobre las conductas de los estudiantes que ayudan al éxito académico. Además, también se tienen en cuenta las perspectivas sobre las habilidades sociales de Gresham (1986) y Greenspan (1981) de que los individuos socialmente competentes son aquellos que han desarrollado una comprensión intuitiva de las normas y los comportamientos apropiados en las interacciones sociales.
En otros estudios, como los de Carmona y Expósito López (2015), se expone que muchos jóvenes necesitan cambios en sus respuestas socioemocionales ante continuas situaciones de riesgo y no tienen herramientas suficientes para evitar ciertos comportamientos conflictivos.
Conclusión
Realizar un diagnóstico preciso sobre las competencias socioemocionales y el análisis de las necesidades formativas en el ámbito de las habilidades sociales que necesitan los estudiantes de Educación Secundaria permitirá diseñar estrategias de intervención individuales y en grupo adaptadas a las áreas de competencias identificadas como inadecuadas. Estas estrategias han demostrado que contribuyen de forma eficaz a mejorar los resultados académicos, sobre todo la autosuficiencia, toma de decisiones y resolución de problemas, así como la gestión de estrés y salud.